Carmen Valdés 06-06-2024
Job 34:1-6
Además Eliú dijo: 2Oíd, sabios, mis palabras; y vosotros, doctos, estadme atentos. 3Porque el oído prueba las palabras, como el paladar gusta lo que uno come. 4Escojamos para nosotros el juicio, conozcamos entre nosotros cuál sea lo bueno. 5Porque Job ha dicho: Yo soy justo, y Dios me ha quitado mi derecho. 6¿He de mentir yo contra mi razón? Dolorosa es mi herida sin haber hecho yo transgresión.
En Job 33:6 “Heme aquí a mí en lugar de Dios, conforme a tu dicho; de barro fui yo también formado”.
Eliú (fue una amistad o personaje que visitaba a Job), él hablaba poniéndose y ocupando el lugar de Dios, Job no sabía, que no estaba en las manos de Dios, que Satanás se lo había pedido para zarandearlo. Y Dios se lo concedió con el propósito de que viera la integridad de Job. Pero; para que no se exaltara demasiado, por medio de Eliú, Dios le estaba mostrando al Mesías, Job, no era el Salvador, no era el Mesías, y no era Dios el que le hizo pasar por tantas estas cosas horribles, con eso y todo. Al final, Dios le devolvió, el doble de todo lo que había perdido, y sus hijas fueron mujeres muy bellas, además en:
Ezequiel 14:14 “Si estuviesen en medio de ella estos tres varones, Noé, Daniel y Job, ellos por su justicia librarían únicamente sus propias vidas, dice Jehová el Señor”.
En este versículo podemos observar que Dios reconoce la integridad de Job, y su Justicia. Dios no deja a nadie sin Justificar, si oyen su Palabra y aceptan al Justo de los Justos, esta es la única manera de recibir Justicia de Dios. Pues Jesucristo, es Justicia de Dios, Glorias y Alabanzas a Nuestro Señor. Al Dios que viene con retribución, el Dios de Israel 🇮🇱.
Es increíble ver que hasta en los tiempos antiguos el vanagloriase era algo tremendo, como lo hizo Eliú. El hombre es predominante queriendo ser mayor que el creador. Eso fue lo que le paso a satanás, que quiso tomar el lugar de su Creador. ¿Cómo podemos pensar que somos más grande del que nos creó? El Señor ama la nobleza de corazón y la humildad, bajemos nuestras cabezas, no somos nada, démosle la gloria a nuestro Creador y Señor Jesucristo.
Toda Adonai Israel. Gracias Al Dios De Israel. Maranatha מרנא