Reflexión Juan 12:47-48 Habacuc 1:12-17 Carmen Valdés

Carmen Valdés 07-27-2022

Juan 12:47-48

47Al que oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo; porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo. 48 El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero. 

Dios, nos ha hablado, por medio de sus Profetas desde el principio haciendo entender el futuro de la humanidad, hasta que vino Él mismo en la persona de Nuestro Señor para enseñarnos toda verdad, y la forma de Salvación como mensaje único.

Todo se ha cumplido. El enemigo haciendo zafra con los incrédulos que ponen sus esperanzas en lo que no es Dios, mientras los gigantes se levantan y los indoctos e Incautos caen en las redes preparadas por El Dragón, profetizado ya por el profeta Habacuc, hace muchos años.

Habacuc 1: 12-17

12¿No eres tú desde el principio, oh, Jehová, Dios mío, Santo mío? No moriremos. Oh, Jehová, para juicio lo pusiste; y tú, oh Roca, lo fundaste para castigar. 13Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver el agravio; ¿por qué ves a los menospreciadores, y callas cuando destruye el impío al más justo que él, 14y haces que sean los hombres como los peces del mar, como reptiles que no tienen quien los gobierne? 15Sacará a todos con anzuelo, los recogerá con su red, y los juntará en sus mallas; por lo cual se alegrará y se regocijará. 16Por esto hará sacrificios a su red, y ofrecerá sahumerios a sus mallas; porque con ellas engordó su porción, y engrasó su comida. 17¿Vaciará por eso su red, y no tendrá piedad de aniquilar naciones continuamente?

Dios es nuestro amparo y fortaleza. Pidámosle al Señor su regreso para salvarnos de lo que se avecina. Ven Señor Jesús, El Espíritu y la Iglesia dicen ven. Glorias al Santo de Israel ??.

1 thought on “Reflexión Juan 12:47-48 Habacuc 1:12-17 Carmen Valdés

  1. mdorsey1964 Post author

    Hay muchas personas que viven creyendo que no hay nada después de la muerte, que vida tan triste es creer que no hay una mejor vida, una esperanza para el futuro. Nosotros somos bendecidos por que sabemos que el Señor nos tiene una mejor casa, una mejor vida y hasta una corona. ¿Por qué? Porque somos hijos de un Rey, haciéndonos, “Príncipes y Princesas de una Heredad Eterna, sin sufrimientos y dolor. Que maravilloso es nuestro Padre. Te amo Señor.
    Maranata

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