Referencia: Unidad Temática
En un principio, este inmenso reino ocupaba la región situada al norte del golfo Pérsico, pero acabó extendiéndose desde el mar Egeo y Egipto hasta el noroeste de la India, e incluía Judea. Asentados en la llanura de Irán.
Los medos se concentraban en el norte de la meseta, aunque con el tiempo se extendieron a Armenia y Cilicia.
Los persas, por otro lado, habitaban la parte suroccidental, al este del valle del Tigris. (Babilonia)
A mediados del siglo VI a.C. (6), los dos reinos se aliaron a las órdenes de Ciro y formaron la potencia mundial medo persa.
Ciro tomó Babilonia en 539 a.C. Sus dominios se extendieron desde la India, en el este, hasta Egipto y la actual Turquía, en el oeste.
Durante los 1700 años de este imperio, llego a extenderse en 3 continentes. Siendo así considerado uno de los mayores imperios de la historia.
Los medos y los persas, fueron gobernados por varias familias nobles.
Una de estas produjo la dinastía de reyes aqueménidas, linaje real del que procedió el fundador del Imperio persa: Ciro el Grande.
Ciro nació de padre persa y madre meda, y unió a los persas bajo su caudillaje.
Hasta entonces los medos habían dominado a los persas, pero Ciro consiguió una rápida victoria sobre el rey medo Astiages y capturó su capital, Ecbátana (550 a.C.).
Daniel 8:3,20
3Alcé los ojos y miré, y he aquí un carnero que estaba delante del río, y tenía dos cuernos; y aunque los cuernos eran altos, uno era más alto que el otro; y el más alto creció después. 20En cuanto al carnero que viste, que tenía dos cuernos, estos son los reyes de Media y de Persia.
El Imperio medo quedó así bajo el control de los persas. Ciro combinó las costumbres y leyes de los dos pueblos, unió sus reinos y dio expansión a sus conquistas. Aunque los medos estaban bajo el dominio de los persas, el imperio era definitivamente de naturaleza de dos elementos. Había medos en puestos encumbrados y comandaban ejércitos persas, a organización imperial persa manifiesta una considerable habilidad administrativa. Además de la junta consultiva o consejo privado del rey, compuesta por “siete príncipes de Persia y Media”
Ester 1:14
14Y estaban junto a él Carsena, Setar, Admata, Tarsis, Meres, Marsena y Memucán, siete príncipes de Persia y de Media que veían la cara del rey, y se sentaban los primeros del reino)
Esdras 7:14
14 Porque de parte del rey y de sus siete consejeros eres enviado a visitar a Judea y a Jerusalén, conforme a la ley de tu Dios que está en tu mano.
Había sátrapas nombrados sobre regiones o países importantes, como, por ejemplo: Media, Elam, Partia, Babilonia, Asiria, Arabia, Armenia, Capadocia, Lidia, Jonia y, al extenderse el imperio, Egipto, Etiopía y Libia.
El imperio Medo Persa sin duda hizo proezas de la ingeniería: carreteras, puertas y canales sin comparación. Inicialmente, Ciro el Grande en el 559 a.C. levanto Persia de la nada. Conquistando a su paso grandes extensiones de tierra. Posteriormente, Darío el Grande, primo de Ciro tomo su lugar dando comienzo a Persépolis, un desafío colosal.
(Alejandro Magno marchó a la capital persa de Persépolis y después de saquear sus tesoros, quemó el gran palacio y la ciudad circundante hasta los cimientos, destruyendo cientos de años de escritos religiosos y arte junto con los magníficos palacios y salas de audiencia que había hecho de Persépolis la joya del imperio)
Comienza entonces la Batalla de maratón, Los persas en venganza sobre Atenas (Griegos) Superando los persas en número 10 a 1 con cerca de 200 barcos.
En el año 550 a.C. muere Darío y deja a su hijo Jerjes dando comienzo a una nueva batalla, esta vez 674 barcos unidos cruzando Asia y Europa de lado a lado. Jerjes prendió fuego a Atenas y en el 465 a.C. muere, dejando como sucesor a Artajerjes quien construiría la gran sala de las 100 columnas.
Finalmente, Darío III seria conocido como el último rey persa hasta la conquista por Alejandro Magno.
Una Potencia Militar
Es posible que los persas hayan sido los mejores arqueros de la historia.
A los niños persas se les enseñaba a disparar con el arco y a cabalgar desde los cinco años hasta los veinte; su caballería era experta incluso en disparar flechas hacia atrás.
La estrategia persa se fundaba en la maniobrabilidad y libertad de movimiento de los arqueros, que atacaban al enemigo con una lluvia de flechas.
Esta Fue La Base De Una Sociedad Creciente
Desde los cinco, hasta los veinte años, sólo enseñaban a sus hijos tres cosas:
- Montar a caballo
- Disparar el arco
- Decir la verdad… Consideraban que mentir constituía la mayor deshonra.
Cuando se halló el decreto de Ciro unos dieciocho años después de que se emitió, el rey Darío reconoció la legalidad de la postura judía respecto a la edificación del templo y ordenó que se cooperara con ellos plenamente.
Esdras 6:1-12
1Entonces el rey Darío dio la orden de buscar en la casa de los archivos, donde guardaban los tesoros allí en Babilonia. 2Y fue hallado en Acmeta, en el palacio que está en la provincia de Media, un libro en el cual estaba escrito así: Memoria: 3En el año primero del rey Ciro, el mismo rey Ciro dio orden acerca de la casa de Dios, la cual estaba en Jerusalén, para que fuese la casa reedificada como lugar para ofrecer sacrificios, y que sus paredes fuesen firmes; su altura de sesenta codos, y de sesenta codos su anchura; 4y tres hileras de piedras grandes, y una de madera nueva; y que el gasto sea pagado por el tesoro del rey. 5Y también los utensilios de oro y de plata de la casa de Dios, los cuales Nabucodonosor sacó del templo que estaba en Jerusalén y los pasó a Babilonia, sean devueltos y vayan a su lugar, al templo que está en Jerusalén, y sean puestos en la casa de Dios. 6Ahora, pues, Tatnai gobernador del otro lado del río, Setar-boznai, y vuestros compañeros los gobernadores que estáis al otro lado del río, alejaos de allí. 7Dejad que se haga la obra de esa casa de Dios; que el gobernador de los judíos y sus ancianos reedifiquen esa casa de Dios en su lugar. 8Y por mí es dada orden de lo que habéis de hacer con esos ancianos de los judíos, para reedificar esa casa de Dios; que, de la hacienda del rey, que tiene del tributo del otro lado del río, sean dados puntualmente a esos varones los gastos, para que no cese la obra. 9Y lo que fuere necesario, becerros, carneros y corderos para holocaustos al Dios del cielo, trigo, sal, vino y aceite, conforme a lo que dijeren los sacerdotes que están en Jerusalén, les sea dado día por día sin obstáculo alguno, 10para que ofrezcan sacrificios agradables al Dios del cielo, y oren por la vida del rey y por sus hijos. 11También por mí es dada orden, que cualquiera que altere este decreto, se le arranque un madero de su casa, y alzado, sea colgado en él, y su casa sea hecha muladar por esto. 12Y el Dios que hizo habitar allí su nombre, destruya a todo rey y pueblo que pusiere su mano para cambiar o destruir esa casa de Dios, la cual está en Jerusalén. Yo Darío he dado el decreto; sea cumplido prontamente.
Los Medos
Pueblo de pastores arios, al asentarse comenzaron a practicar la agricultura. Su organización era inicialmente tribal, es decir, estaban divididos en tribus que se unían, en caso de guerra, contra un enemigo común.
En los siglos IX (9) y VIII (8) a.C. fueron sometidos a tributo por los poderosos vecinos de la Mesopotamia: los asirios, quienes también dominaron a los persas.
A fines del siglo VIII (8) a.C. los medos organizaron un Estado y sometieron a los persas.
Permanecieron igualmente bajo dominio Asirio, hasta que su rey Ciaxares se unió con el rey Nabopolasar de Babilonia y juntos planearon terminar con la dominación Asiria. Esta unión tuvo éxito.
A su término, Ciaxares y el rey caldeo dividieron los territorios de los asirios; para los medos quedó la Alta Mesopotamia y el Irán occidental.
Su hegemonía terminó en el siglo VI (6) a.C., cuando surgió un nuevo poder el de sus hermanos los persas.
Los Persas–Babilonia
Este pueblo desarrollará una nueva política expansiva que lo convertirá en el dueño del Cercano Oriente.
En un principio estaban divididos en 10 ó 12 tribus, cuyos jefes tenían el título de rey. Entre ellos no había acuerdo para unificarse en una sola tribu, por lo que sufrieron la dominación meda. Según la tradición, Aquémenes, quien guió a los persas hacia el Sur, fundó la dinastía de los Aqueménidas, a la cual pertenecerán los grandes reyes posteriores.
Pero fue Ciro quien logró unificar a las distintas tribus en que se dividían los persas, para posteriormente derrotar a los medos y terminar con su supremacía. Ciro convirtió a la ciudad de Susa en la capital del nuevo Estado en el 550 a. C. y decidió comenzar una política de conquistas por los territorios vecinos.
Después de imponerse a los medos, se dirigió contra el reino de Lidio. Este reino, ubicado en las costas del Asia Menor, era famoso por su riqueza y por ser el centro vital de las comunicaciones, dado que por allí pasaban las rutas del comercio con Grecia.
Ciro también incorporó las ciudades griegas del Asia Menor a sus dominios. Se dirigió luego contra el Imperio Neobabilónico, que conquistó rápidamente; anexó así la Mesopotamia y sus dependencias sirias a los dominios persas en el 1538 a.C. A su muerte, su hijo Cambises continuó la tarea expansiva, dirigiéndose a Egipto y conquistándolo fácilmente en el 525 a.C.
Durante su ausencia, el mago Gaumata, representante de la casta sacerdotal, provocó una revuelta y se apoderó del trono. Cambises intentó volver de Egipto, pero murió sorpresivamente en el viaje. Dario, esposo de una hija de Ciro, organizó una rebelión de nobles contra el usurpador del trono, el mago Gaumata, y lo derrotó. Se convirtió entonces en el nuevo rey de los persas. Será el verdadero organizador del imperio, y con quien éste llega a su mayor esplendor.
Un Arte Para La Monarquía: No podemos afirmar que existió un arte persa propiamente. En realidad, la producción artística fue una conjunción de elementos pertenecientes a las diferentes culturas sometidas. Por ejemplo, de los egipcios tomaron la construcción de hipogeos; de la Mesopotamia, la utilización del ladrillo, las figuras de toros alados y la costumbre de erigir palacios sobre plataformas elevadas; de Grecia, la armonía y La esbeltez de ciertos elementos constructivos.
Excelente