- Jesús hizo muchas apariciones después de su muerte para confirmación de su resurrección.
- 1-La Primera Aparición Fue A María Magdalena, En La Mañana De La Resurrección 33 d.C.
Juan 20:11-18
- 11Pero María estaba fuera llorando junto al sepulcro; y mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro; 12y vio a dos ángeles con vestiduras blancas, que estaban sentados el uno a la cabecera, y el otro a los pies, donde el cuerpo de Jesús había sido puesto. 13Y le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde le han puesto. 14Cuando había dicho esto, se volvió, y vio a Jesús que estaba allí; mas no sabía que era Jesús. 15 Jesús le dijo: Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas? Ella, pensando que era el hortelano, le dijo: Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo lo llevaré. 16Jesús le dijo: ¡María! Volviéndose ella, le dijo: ¡Raboni! (que quiere decir, Maestro). 17Jesús le dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; más ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios. 18Fue entonces María Magdalena para dar a los discípulos las nuevas de que había visto al Señor, y que él le había dicho estas cosas.
- 2-La Segunda Aparición Fue En La Mañana Del 33 d.C. Según Los Eruditos De La Biblia y Fue A Las Mujeres Que Regresaban Del Sepulcro.
Mateo 28:9
- 9He aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. 10Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán.
- 3-La Tercera Aparición Fue A Pedro El Domingo De La Mañana Cuando Pedro Se Encontraba Solo.
Lucas 24:34
- 34Que decían: Ha resucitado el Señor verdaderamente, y ha aparecido a Simón.
- 4-La Cuarta Aparición Fue A Los Discípulos En El Camino De Emaús.
Lucas 24:13-31
- 13Y he aquí, dos de ellos iban el mismo día a una aldea llamada Emaús, que estaba a sesenta estadios de Jerusalén. 14E iban hablando entre sí de todas aquellas cosas que habían acontecido. 15Sucedió que mientras hablaban y discutían entre sí, Jesús mismo se acercó, y caminaba con ellos. 16Más los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen. 17Y les dijo: ¿Qué pláticas son estas que tenéis entre vosotros mientras camináis, y por qué estáis tristes? 18 Respondiendo uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le dijo: ¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no has sabido las cosas que en ella han acontecido en estos días? 19Entonces él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: De Jesús nazareno, que fue varón profeta, poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo; 20 y cómo le entregaron los principales sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia de muerte, y le crucificaron. 21Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel; y ahora, además de todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha acontecido. 22 Aunque también nos han asombrado unas mujeres de entre nosotros, las que antes del día fueron al sepulcro; 23y como no hallaron su cuerpo, vinieron diciendo que también habían visto visión de ángeles, quienes dijeron que él vive. 24Y fueron algunos de los nuestros al sepulcro, y hallaron así como las mujeres habían dicho, pero a él no le vieron. 25Entonces él les dijo: ¡Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho! 26¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? 27Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían. 28 Llegaron a la aldea adonde iban, y él hizo como que iba más lejos. 29 Más ellos le obligaron a quedarse, diciendo: Quédate con nosotros, porque se hace tarde, y el día ya ha declinado. Entró, pues, a quedarse con ellos. 30Y aconteció que estando sentado con ellos a la mesa, tomó el pan y lo bendijo, lo partió, y les dio. 31Entonces les fueron abiertos los ojos, y le reconocieron; más él se desapareció de su vista. 32Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras? 33Y levantándose en la misma hora, volvieron a Jerusalén, y hallaron a los once reunidos, y a los que estaban con ellos, 34que decían: Ha resucitado el Señor verdaderamente, y ha aparecido a Simón. 35Entonces ellos contaban las cosas que les habían acontecido en el camino, y cómo le habían reconocido al partir el pan.
- 5-La Quinta Aparición Fue A Los Diez Apóstoles, Estando Tomás Ausente.
Juan 20:19-24
- 19Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, estando las puertas cerradas en el lugar donde los discípulos estaban reunidos por miedo de los judíos, vino Jesús, y puesto en medio, les dijo: Paz a vosotros. 20Y cuando les hubo dicho esto, les mostró las manos y el costado. Y los discípulos se regocijaron viendo al Señor. 21Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío. 22Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo. 23A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; y a quienes se los retuviereis, les son retenidos. 24 Pero Tomás, uno de los doce, llamado Dídimo, no estaba con ellos cuando Jesús vino.
- 6-La Sexta Aparición Fue A Los Once Apóstoles Pero Esta Vez Estaba Tomás Presente.
Juan 20:26-29
- 26Ocho días después, estaban otra vez sus discípulos dentro, y con ellos Tomás. Llegó Jesús, estando las puertas cerradas, y se puso en medio y les dijo: Paz a vosotros. 27Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente. 28Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío! 29Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.
- 7-La Séptima Aparición Fue A Los Siete Apóstoles Que Estaban Pescando En El Mar De Galilea.
Juan 21:1-14
- 1Después de esto, Jesús se manifestó otra vez a sus discípulos junto al mar de Tiberias; y se manifestó de esta manera: 2 Estaban juntos Simón Pedro, Tomás llamado el Dídimo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo, y otros dos de sus discípulos. 3Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le dijeron: Vamos nosotros también contigo. Fueron, y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada. 4Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa; más los discípulos no sabían que era Jesús. 5Y les dijo: Hijitos, ¿tenéis algo de comer? Le respondieron: No. 6Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces. 7 Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el Señor! Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella), y se echó al mar. 8Y los otros discípulos vinieron con la barca, arrastrando la red de peces, pues no distaban de tierra sino como doscientos codos. 9Al descender a tierra, vieron brasas puestas, y un pez encima de ellas, y pan. 10Jesús les dijo: Traed de los peces que acabáis de pescar. 11Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió. 12Les dijo Jesús: Venid, comed. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú, quién eres? sabiendo que era el Señor. 13Vino, pues, Jesús, y tomó el pan y les dio, y asimismo del pescado. 14Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos, después de haber resucitado de los muertos.
- 8-La Octava Aparición Fue A Los Once Apóstoles En Un Monte De Galilea.
Mateo 28:16-20
- 16Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. 17Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban. 18Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. 19Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 20enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
- 9-La Novena Aparición Ha De Ver Sido Maravillosa Ya Que Se Le Apareció A Más De Quinientas Personas En Un Solo Lugar. 33 b.C.
1 Corintios 15:6
- 6Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen.
- 10-La Décima Aparición Fue A Jacobo.
1 Corintios 15:7
- 7Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles.
- 11-La Undécima Aparición Que Nuestro Señor Hizo Fue A Sus Apóstoles Antes De Su Ascensión En El Monte De Los Olivos. 33 b.C.
Lucas 24:50-51
- 50Y los sacó fuera hasta Betania, y alzando sus manos, los bendijo. 51 Y aconteció que bendiciéndolos, se separó de ellos, y fue llevado arriba al cielo. 52Ellos, después de haberle adorado, volvieron a Jerusalén con gran gozo; 53y estaban siempre en el templo, alabando y bendiciendo a Dios. Amén.
Hechos 1:3-5
- 3A quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios. 4Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí.
- 5Porque Juan ciertamente bautizó con agua, más vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.
- Como hemos visto Nuestro Señor se le apareció a muchas personas, no solo a sus discípulos, sino también a personas que posiblemente Él no había tenido relación o contacto personal con ellas. ¿Cuál fue la razón de enseñar y mostrar su resurrección al mundo? Bueno, el Señor quería hacer constar su resurrección para que no hubiera duda de que Él era el Cristo.
- En Israel era común el encontrarse a persona haciéndose llamar el “Cristo” y tenían muchos seguidores porque esperaban que estos Cristos los salvarían del yugo romano. Nuestro Señor vino con otro plan, el de salvar nuestras almas.
- Aquí les contare la historia de Simón de Perea: Simón de Perea fue un esclavo de Herodes el Grande quien se revelo y se creía ser un cristo, fue asesinado por los romanos en el año 4 a.C. y el 15 d.C. Flavio Josefo lo menciona en sus escritos.
- Escrito de Josefo: Estaba también Simón, que había sido un esclavo del rey Herodes, pero en otros aspectos era una persona atractiva, con un cuerpo alto y robusto; él era uno muy superior a los otros de su orden, y había tenido grandes cosas comprendidas a su cuidado. Este hombre fue elevado en el estado desordenado de las cosas, y se atrevió a poner una diadema en la cabeza, mientras que un cierto número de las personas estaban con él, y por ellos fue declarado ser un rey, y se creía más digno de esa dignidad que cualquier otra persona. Él quemó el palacio real en Jericó, y saqueó lo que quedaba de él. También prendieron fuego a muchas otras de las casas del rey en varios lugares del país, las destruyó, y permitió que los que estaban con él tomasen lo que quedaba en ellas como pillaje. Él podría haber hecho grandes cosas, pero el cuidado le llevó a reprimirse inmediatamente. [El comandante de la infantería de Herodes] Grato se unió a algunos soldados romanos, tomó las fuerzas que tuvo con él, y se reunió con Simón. Y después de un estupenda y una larga lucha, gran parte de los que habían venido de Perea (un cuerpo desordenado de hombres, luchando más bien de una forma atrevida que de una manera hábil) fueron destruidos. Aunque Simón se había salvado a sí mismo volando a través de un cierto valle, Grato lo alcanzó, y le cortó la cabeza. Guerra Judía 2.57-59 y Antigüedades Judías 17.273-277
- Simón de Perea declaraba ampliamente ser el Cristo y tenía muchos seguidores, el declaraba que no moriría, ya que al morir seria resucitado a los tres días. Simón de Perea murió por mano de los romanos que lo perseguían, los romanos temían que él incitara a sus seguidores a sublevarse contra Roma. Cuando Simón de Perea murió los romanos decidieron por cortarle la cabeza, y dejar su cuerpo al aire libre, los seguidores trataron de recuperar el cuerpo para hacerle una sepultura, la cual fue impedida, los romanos no dejaron que sus seguidores enteraran su cuerpo y fue comido por las aves y perros salvajes, al ver sus seguidores que murió y nunca resucito cambiaron su teología.
- Este es uno de los ejemplos por la cual Nuestro Señor quiso revelar que Él si era el Cristo, que murió y resucito a los tres días, apareciéndosele a muchas personas para que no hubiera duda de su deidad.