¿Es Dios Y Jesús La Misma Persona?

• Cuando en las Escrituras se habla de Señor se está refiriendo a Dios.

Juan 14:8-11

⁸Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. ⁹Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? ¹⁰¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. ¹¹Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.

Por supuesto que sí ya que las Escrituras confirman que Dios y Jesús son una misma persona, aunque en las Escrituras, no hay un registro de Jesús diciendo las palabras precisas, “Yo soy Dios”. Sin embargo, eso no significa que Él no proclamó ser Dios. Miren lo que dice Jesús en Juan 10:30, “Yo y el Padre uno somos”. Este versículo nos confirma que Dios y Jesús son uno. Pero fíjense la reacción que causo estas palabras para el pueblo judío. “Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te haces Dios” (Juan 10:33). Los judíos sí entendieron la declaración que Jesús hacía al testificar ser Dios. En los versículos siguientes, vemos como Jesús no los corrige, eso muestra que Jesús realmente estaba diciendo que Él sí era Dios. “Yo y el Padre uno somos” (Juan 10:30).

En Juan 8:58 podemos encontrar otro ejemplo que Jesús es Dios. Cuando Jesús les dice “De cierto, de cierto os digo: antes que Abraham fuese, yo soy”. Aquí podemos observar claramente que Él es Dios, ya que sabemos que Abraham vivió muchos años antes que Jesús viniera a la tierra. Esta respuesta enfado a los judíos que escucharon esta declaración, y procedieron a tomar piedras para matarlo por blasfemia, como mandaba hacerse en la Ley de Mosaica. (Levítico 24:16).

Observemos lo que nos dice:

Juan 1:1

¹En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.

Juan 1:14

¹⁴Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 

“Aquel Verbo fue hecho carne”. Esto indica claramente que Jesús es Dios en la carne.

Hechos 20:28

²⁸Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.

¿Quién compró la iglesia con Su propia sangre? Jesucristo. Este versículo es agua clara a nuestra pregunta ya que todos sabemos que Jesús murió en la cruz comprando Su iglesia con Su propia sangre. ¡Por lo tanto, Jesús es Dios!

Esto es maravilloso como uno de los discípulos del Señor Jesús declara y afirma que Jesús es Dios, y fue nada menos que el Apóstol Tomás cuando dijo en:

Juan 20:28

²⁸Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío! 
Jesús nuevamente no lo corrigió.

Ahora, el versículo siguiente es sumamente bello ya que en el libro de Tito nos anima a esperar la venida de nuestro Dios y Salvador-Jesucristo.

Tito 2:13

¹³aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo.

2 Pedro 1:1-2

¹Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra: ² Gracia y paz os sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús.

En Hebreos 1:8 el Señor habla de Jesús, refiriéndose e indicando que Jesús es verdadero Dios.

Hebreos 1:8

⁸Más del Hijo dice: Tu trono, oh, Dios, por el siglo del siglo; cetro de equidad es el cetro de tu reino.

Aquí vamos a leer varios versículos en los que Jesús acepta que lo adoren, si esto no hubiera sido lo correcto Jesús los hubiera reprendido, mientras tanto nunca lo hizo. Si Jesús no fuera Dios, Él le hubiera dicho a la gente que no le adoraran, así como lo hizo el ángel en Apocalipsis. Hay muchos otros versículos y pasajes de la Escritura que argumentan en favor de la deidad de Jesús.
El versículo de Mateo 2:11 vemos claramente como los magos que lo visitaron al nacer se postraron y lo adoraron.

Apocalipsis 19:9-10-Aquí el ángel le dice a Juan no te postres ante mí, porque somos consiervos.

⁹Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios. ¹⁰ Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía.

Mateo 2:11

¹¹Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra.

Mateo 14:33

³³Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios.

Mateo 28:9,17

⁹he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. ¹⁷Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban.

Lucas 24:52

⁵² Ellos, después de haberle adorado, volvieron a Jerusalén con gran gozo.

Juan 9:35-38

³⁵Oyó Jesús que le habían expulsado; y hallándole, le dijo: ¿Crees tú en el Hijo de Dios? ³⁶Respondió él y dijo: ¿Quién es, Señor, para que crea en él? ³⁷Le dijo Jesús: Pues le has visto, y el que habla contigo, él es. ³⁸Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró. 

La razón más significativa para decir que Jesús tiene que ser Dios, es que, si Él no es Dios, Su muerte no habría sido suficiente para pagar el castigo por los pecados de todo el mundo.

1 Juan 2:2

²Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo. 

Un ser creado, que Jesús sería si no fuera Dios, no podría pagar la pena infinita requerida por el pecado contra un Dios infinito. Solamente Dios pudo pagar tal penalidad infinita. Solamente Dios pudo tomar los pecados del mundo, muriendo y resucitando, siendo victorioso sobre el pecado y la muerte.

 2 Corintios 5:21

²¹Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

Juan 10:30

³⁰Yo y el Padre uno somos.

Juan 8:58-59

⁵⁸Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy. ⁵⁹Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.

Levítico 24:16

¹⁶Y el que blasfemare el nombre de Jehová, ha de ser muerto; toda la congregación lo apedreará; así el extranjero como el natural, si blasfemare el Nombre, que muera. 

Juan 14:31

³¹Más para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago, levantaos, vamos de aquí.

Juan 5:19,26-28

¹⁹Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente. ²⁶Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo; ²⁷y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre. ²⁸No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz.

Juan 16:28-29

²⁸Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre. ²⁹Le dijeron sus discípulos: He aquí ahora hablas claramente, y ninguna alegoría dices.

Mateo 26:1-2

¹Cuando hubo acabado Jesús todas estas palabras, dijo a sus discípulos: ²Sabéis que dentro de dos días se celebra la pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado.

Como ven, quien murió fue el Hijo del Hombre ya que Dios no muere.

Una pregunta sin Respuesta. Cristo quiere decir Mesías:

Mateo 22:41-46 ¿De quién es hijo el Cristo?

⁴¹Y estando juntos los fariseos, Jesús les preguntó, ⁴²diciendo: ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo? Le dijeron: De David. ⁴³Él les dijo: ¿Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor, diciendo: ⁴⁴Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies? ⁴⁵Pues si David le llama Señor, ¿cómo es su hijo? ⁴⁶Y nadie le podía responder palabra; ni osó alguno desde aquel día preguntarle más.

Hechos 2:36

³⁶Sepa, pues, ciertísimamente toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo.