La segunda ley de la termodinámica establece que el Universo está en decadencia y deteriorándose, gradualmente desorganizándose y descomponiéndose. La evolución directamente contradice esta ley, por establecer que los cambios que se producen en los organismos son solo para el mejoramiento y avance, no para su deterioro y extinción. Cuando leemos las Escrituras nos enseña lo contrario” y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer”
Hebreos 8:13
13Al decir: Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer.