El Arca del Tabernáculo, Arca de la Alianza o Arca del Pacto es un símbolo de Dios, es una caja cubierta de Oro con dimensiones especificas mandadas por Dios. Dios hizo un pacto (un pacto condicional) con los hijos de Israel a través de su siervo Moisés. El Señor promete bienestar a ellos y a sus hijos durante generaciones si le obedecían a Él y a sus leyes; pero Él siempre advirtió del castigo y la dispersión si desobedecían. Como una señal de su pacto, Él hizo que los israelitas construyeran una caja según Su propio diseño, para colocar las tablas que contenían los Diez Mandamientos. Esta caja fue llamada un “arca” y fue hecha de madera de acacia cubierta con oro. El arca debía ser ubicada en el Lugar Santísimo del Tabernáculo en el desierto y finalmente en el Templo cuando fuera construido en Jerusalén. Esta arca es conocida como el Arca del Pacto.
El verdadero significado del Arca del Pacto es la tapa de la caja, conocida como el “propiciatorio”. El término “propiciatorio” viene de una palabra hebrea que significa “cubrir, aplacar, apaciguar, limpiar, cancelar o hacer expiación”. Fue aquí donde el sumo sacerdote sólo una vez al año, entraba al Lugar Santísimo, y se hacía el rito para limpiar los pecados del Sumo Sacerdote y así también los del pueblo de Israel. El sacerdote rociaba la sangre de un animal sacrificado sobre el propiciatorio para aplacar la ira y el enojo de Dios por los pecados pasados cometidos. Este era el único lugar donde esta expiación podría llevarse a cabo.
Levítico 16:34
- 34Y esto tendréis como estatuto perpetuo, para hacer expiación una vez al año por todos los pecados de Israel. Y Moisés lo hizo como Jehová le mandó.
- El propiciatorio del arca fue una prefiguración simbólica del último sacrificio para todo pecado: la sangre de Cristo derramada en la Cruz para perdón de los pecados. El apóstol Pablo, un ex fariseo y familiarizado con el Antiguo Testamento, conoció este concepto muy bien cuando escribió acerca de Cristo siendo nuestra cobertura para el pecado en:
Romanos 3:24-25
- 24Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, 25A quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados.
- Tal y como hubo solamente un lugar de expiación de los pecados en el Antiguo Testamento-el propiciatorio del Arca del Pacto-así también hay un solo lugar para la expiación en el Nuevo Testamento y los tiempos actuales—la Cruz de Jesucristo. Como cristianos, ya no miramos el Arca, sino al Señor Jesús mismo como la propiciación y la expiación por nuestros pecados.