Carmen Váldes 04-19-2022
Apocalipsis 5:5-8
5Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.
6Y miré, y vi que en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de los ancianos, estaba en pie un-Cordero como inmolado, que tenía siete cuernos, y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra. 7Y vino, y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. 8Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos.
Alabanzas al que Vive: Allí en la Isla de Patmos estaba preso el discípulo amado por la causa de predicar de su Rey y Señor. Juan no estaba en su carne; él veía lo invisible, estaba en El Espíritu y su llanto conmovió al Dios de los Cielos, él; Juan reconoció Al Cordero Pascual allí estaba su Amigo para enseñarle su amor por la Iglesia. Sus siete cuernos o poder lo identificaban y siete ojos, puesto sobre la iglesia, manifestaban cuanto la amaba.
Le enseño que no se olvidaba de las oraciones, todos los presentes tenían copas de oro, con las oraciones: el Oro, representa la deidad, esas oraciones están en el Corazón de Dios.
Bendito es nuestro Dios que se compadece con nuestro verdadero llanto.
Glorias al Cordero que puede abrir los sellos de los corazones duros, para que le sirvan. Glorias al Dios de Israel ??.