Reflexión Hebreos 1:3 “Jesucristo Hombre”

Carmen Valdés 01-06-2024  

Hebreos 1:3

³El cual, siendo el resplandor de Su Gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de Su Poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de Sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las Alturas.

Dios maravilloso Dios; les habla a los hebreos, su pueblo escogido, que aún muchos no han reconocido al Señor creador del Cielo y de la Tierra, que con Su Sangre limpió la nuestra, para ser salvos.

Dios, en la persona de Jesucristo al igual que El Padre y El Espíritu Santo; creador de los Cielos y de la Tierra, actuaron en el hombre, enfermo de pecado, como aquel que tiene los riñones enfermos que no puede su sangre ser limpia, pues sus riñones están atascados; los riñones son órganos vitales pues purifican la sangre de nuestros cuerpos.

Cuando el riñón se enferma, Dios le ha dado a la Ciencia la manera de limpiarlo: el hacerle Dialices, este es un método muy conocido, que quiere decir “atravesar o a través de un riñón Grande”, que hace pasar la sangre del individuo enfermo y la limpia.

Pues a través de la sangre de Jesucristo somos limpios y no hay otro nombre dado en el Cielo, en la Tierra o debajo de la Tierra, en que podamos ser limpios del atascamiento de pecado, para con Él ir al Cielo. El velo del Templo, con su muerte se rasgó en dos, para darnos paso al Cielo. No le rechacemos. Es El Dios de Israel 🇮🇱.