Caridad Yera 12-15-2022
Juan 21:24-25
24Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas, y escribió estas cosas; y sabemos que su testimonio es verdadero. 25Y hay también otras muchas cosas que hizo Jesús, las cuales si se escribieran una por una, pienso que ni aun en el mundo cabrían los libros que se habrían de escribir. Amén.
El Apóstol Juan termina con un fuerte “Amén” su mensaje evangelístico, que significa, “Así Sea”. El discípulo amado, cómo él mismo se hace llamar; escribió este evangelio, tres epístolas y también la Revelación de Apocalipsis. En realidad la Biblia, es muy distinta a los otros ?, los libros escritos por los hombres, si lo lees varias veces, lo aprendes, y ya no tienes más nada que aprender. La Biblia te enseña a cambiar tu vida, te guía al arrepentimiento, aprendes Quien es el dador de la vida, y quien es Quien la puede quitar, te habla cuando haces mal, y cuando haces bien, ella es una luz que guía tus pasos, es un espejo donde puedes ver cómo eres, y cómo quiere el Señor que tú seas, es una lámpara a tus pies y una luz a tu camino, es una espada, que atraviesa tu corazón, es un martillo, que rompe tu silencio, te enseña amar, te libera de ataduras. En fin, la Biblia es mi necesidad, te dice algo nuevo cada vez que la lees, nadie la puede aprender toda, también es la necesidad tuya. Es la Palabra de Dios escrita en un papel, y que se sale del papel para impregnarse en tú corazón. ¡Ella es Viva!
Glorias al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo de Poder.
Amén, Amén, Amén.
Uno puede leer cualquier libro una vez, y quedar complacido con esa lectura. La Biblia es increíble, uno la lee y la lee y cada vez aprende algo, por la cual su lectura es siempre necesaria para nuestra vida cotidiana. ¿Qué libro usted ha leído que tenga la necesidad de seguir leyéndolo? Ninguno, solo la Biblia.
Toda Adonai Israel. Gracias Al Dios De Israel. Maranata
La Biblia el libro más perfecto del Universo q sería de nosotros si no la tuviéramos me parece q sería imposible pues ella nos enseña a caminar por un camino de rectitud conocer el pecado y a la vez arrepentirnos y así seguir sus palabras y sobre todas las cosas amar.