Cary Yera 08-23-2024
Deuteronomio 30:11-14
11Porque este mandamiento que yo te ordeno hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos. 12No está en el cielo, para que digas: ¿Quién subirá por nosotros al cielo, y nos lo traerá y nos lo hará oír para que lo cumplamos? 13Ni está al otro lado del mar, para que digas: ¿Quién pasará por nosotros el mar, para que nos lo traiga y nos lo haga oír, a fin de que lo cumplamos? 14Porque muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón, para que la cumplas.
Nadie nos tiene que decir acerca de nuestras acciones, si hicimos bien o mal. El corazón es el asiento de nuestras emociones, y vienen todas a la mente, y de la mente a la boca; hablas, o bien te sonríes.
¿Saben? Hay sonrisas maliciosas; así trajeron la desobediencia la primera pareja, siendo engañados por el enemigo de Dios; y traspasó a todos.
Cuando conocemos a Jesús, el Hijo de Dios; eso hace un cambio en nuestra vida; ya somos diferente, conocemos lo que es malo; y lo que es bueno de esto nos advierte la Palabra de Dios: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida”. Proverbios 4:23
Cuando la persona muere, su corazón se paraliza. La existencia está en nuestro corazón; entrégale tu corazón al Señor Jesucristo para que no muera, y estés con Dios por toda la Eternidad. Amén 🙏 Glorias al Padre; al Hijo; y al Espíritu Santo de Poder.
Creo que nuestros sentimientos en cuanto a lo que sentimos y estamos haciendo bien o mal viene del Espíritu Santo, Él es el filtro de nuestras emociones y nos pone en nuestras mentes lo que aceptar o rechazar en momentos donde hay veces el enemigo nos pone circunstancias para tentarnos. El Espíritu Santo, juega una gran parte en nuestras decisiones si lo oímos, y hacemos Su voluntad.
Toda Adonai Israel. Gracias Al Dios De Israel. Maranatha מרנא