Carmen Váldes 05-14-2022
Mateo 5:3
3Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Te has puesto a pensar: ¿quiénes son los pobres en espíritu? Cuando en realidad recibirán una recompensa tan grande como lo es EL REINO DE LOS CIELOS.
Con este verso comienza, LA REGLA DE ORO; lo que es lo mismo “EL SERMÓN DE LA MONTAÑA”. Las “Bienaventuranzas” dadas por Jesús de Nazaret; Rey y Señor del Universo.Pues bien, la respuesta está en las demás bienaventuranzas.
Miremos Los que lloran, los mansos,los que tiene hambre y sed de justicia, los misericordiosos, los de limpio corazón, los pacificadores, los que padecen persecución por causa de la justicia.
Todo esto y más hace el Señor con nosotros cuando le reconocemos como nuestro Salvador. La maldad es mucha, pero tenemos un Dios perdonador; que conoce lo que el enemigo hizo con el hombre. Retengámos las promesas por Él hechas, y no seremos, pobres en espíritu; para darle cabida al más grande, al Espíritu Santo.
Glorias al Dios del Cielo al que todo lo puede al Dios de Israel ??.