Caridad Yera 11-02-2022
Al finalizar la Oración del Padre Nuestro, que nos enseñó Jesús, y que muchos recitamos de memoria, nos aclara el Señor con estas Palabras:
Mateo 6:14-15
14Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15 más si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
Todos en ocasiones ofendemos, o nos ofenden queriendo, o no queriendo; pero qué nos manda el Señor, que “Perdonemos” esto nos es opción, sino un mandato. Nuestro corazón debe estar limpio, alejémonos, de ese pecado, porque nuestra mente claudica delante del Creador.
Si nosotros estuviéramos, como los discípulos estuvieron oyendo a Jesús hablar, ¡qué maravilla! Pero ahora estamos leyendo lo que Él dijo; más el Espíritu Santo está con nosotros y debemos, no echar a un lado sus Palabras porque la gente se admiraba al oírlo:
Mateo 7:29
29porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.
Si obedecemos a los que nos gobiernan; porque así, nos enseña el mismo Señor, mucho más lo que nos enseña Jesús, Él está por encima de todos los gobernantes.
Gloria al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo de Poder.
Amén, Amén, Amén.
¿Como podemos esperar el perdón del Señor que nos creó, cuando nosotros que somos su creación no podemos hacerlo? El pedir perdón no es flaqueza más bien es fuerza. Para el humano no es muy fácil pedir perdón, pero cuando lo hace es una alegría y tranquilidad en el corazón tan inmensa que es como una gran carga que fuera quitada de nuestro cuerpo. Gracias Señor por ayudarnos a comprender cuando estamos en un error y pedir perdón sin ninguna excusa.
Maranata
Es muy fuerte pedir perdón y más los cristianos q vivimos rodeados de personas de tanta maldad pero bueno es un mandato de Dios para mí es mejor ignorarlos y así no crean ningun problema.