Reflexión  Salmos 50:3-5; Salmos 51:16; Salmos 50:6   Caridad Yera

Caridad Yera 08-04-2022

Uno de los aspectos de Dios:

Salmos 50:3-5
3Vendrá nuestro Dios, y no callará; fuego consumirá delante de él, y tempestad poderosa le rodeará. Convocará a los cielos de arriba, y a la tierra, para juzgar a su pueblo. Juntadme mis santos, los que hicieron conmigo pacto con sacrificio.

Cuando la Corte Suprema de los Estados Unidos de América se reúne, lo que ella acuerde, no puede ser revocado, en eso tienen la mayor autoridad.

Ahora bien, hay dos formas en que Dios actuará, los que hicieron con Él pactó con sacrificio ¿qué quiere decir esto? En el Antiguo Pacto, Dios pedía un sacrificio, bien de cordero y también de aves, como la paloma. Más después él dijo:

Salmos 51:16
16Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; no quieres holocausto.

David quería hacer el sacrificio por el pueblo; pero Dios no se lo permitió, si él hubiera muerto por el pueblo, no hubiera servido de nada, solo Dios podía vencer a la Muerte. Dios daría el Sacrificio. El Hijo de Dios, fue el único Sacrificio el Único Vencedor, con Su gran Poder; nadie más podía hacerlo. El juicio es a través de la fe en Jesucristo, si tienes a Jesús o no.

Salmos 50:6
6Y los cielos declararán su justicia, porque Dios es el juez. Selah

Dios tiene Su Corte Suprema en el Cielo.

Amén, Amén, Amén

2 thoughts on “Reflexión  Salmos 50:3-5; Salmos 51:16; Salmos 50:6   Caridad Yera

  1. Yoly

    Que linda esta reflexión. Nos enseña que hubo alguien que no tenía que hacerlo pero lo hizo un Sacrificio Supremo y su nombre es Jesús. ¿Me pregunto, por qué hay tantas personas y deidades haciendo sacrificios cuando ya Él lo hizo todo? Él es claro, no quiere sacrificios o inciensos . Oseas 6:6
    Nos dice:
    6Porque misericordia quiero, y no sacrificio,y conocimiento de Dios más que holocaustos.
    Es tan fácil solo creer que Jesús murió y resucitó de los muertos para nuestra Salvación.
    Maranata

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  2. Carmen Valdés

    Indudablemente, nadie puede ni siquiera agregar un codo a nuestra estatura, sólo Dios puede hacer con su obra lo que El quiere, nada de sacrificio; ya Èl lo hizo todo y nada hay que agregarle

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